Modas dentales, un error que puede durar toda la vida

Modas

Soy de esas personas que han visto cómo ciertas modas pueden hacer mucho daño, especialmente cuando se trata de la boca. Hay algunas modas que pueden dejar consecuencias para siempre, como las que están afectando a montones de personas hoy en día.

En los últimos años he visto cosas que rozan lo absurdo: fundas metálicas, tatuajes dentro del labio, adornos pegados en los dientes, personas limándose los dientes ellas mismas, y hasta aparatos falsos que se ponen por estética. Y aunque puedan parecer cosas sin importancia, la realidad es que muchas son un camino directo a problemas graves de salud.

No pretendo asustarte con todo esto, pero sí hacerte pensar. Porque un error con tus dientes no se soluciona fácilmente, y en muchos casos, sus consecuencias pueden afectarte durante toda tu vida.

 

Las fundas metálicas no son un adorno

Las fundas metálicas para los dientes, también conocidas como “grillz”, se han hecho famosas gracias a cantantes, famosos e influencers. Estas están hechas de materiales como el oro o la plata y se colocan sobre los dientes como si fueran joyas.

El problema empieza cuando la gente las compra por internet y se las pone sin saber si el material es seguro o si se ajustan bien a sus dientes. Algunas personas incluso las usan durante muchas horas o incluso duermen con ellas. El resultado puede ser dolor de encías, desgaste del diente, acumulación de bacterias, mal aliento y hasta infecciones.

Si vas a usar esto, hay que hacerlo con mucho cuidado y, sobre todo, siguiendo las indicaciones de un dentista.

 

Piénsatelo antes de tatuarte el labio por dentro

Sí, hay personas que se tatúan la parte interior del labio. Dicen que es algo discreto y que queda bien. A mí me parece una estupidez, ya que es una zona muy sensible que está en contacto constante con la saliva, la comida y las bacterias.

Esto hace que los tatuajes que se hacen ahí tengan un alto riesgo de infección. Tienes que tener en cuenta que cuando te hacen un tatuaje, se forma una costra, ya que es literalmente una herida. Esa costra necesita mantenerse limpia el mayor tiempo posible hasta que cicatrice. Por tanto, deberíamos evitar que le llegaran restos de alimentos y lavarlo con frecuencia, cosa que es muy complicado tratándose del interior de la boca. Pero el problema no acabará solo con su cicatrización. Las cicatrices en tejidos blandos suelen ser más duras y menos elásticas que el tejido circundante, lo que hace que se formen pequeñas heridas de vez en cuando. Por tanto, nunca te librarás del peligro de una posible infección.

Pero el peligro no está solo en la curación del tatuaje, también hay casos de personas que han terminado con heridas muy molestas, inflamación y cicatrices internas pocos días después de hacérselo. Algunas incluso han tenido problemas al hablar o comer durante semanas.

No es una zona del cuerpo para tatuarse, las cosas claras.

 

Ponerse adornos dentales para aparentar puede salirte caro

Otra moda que ha ganado popularidad es la de ponerse brillantes o pequeños adornos en los dientes. A veces se pegan con pegamento, otras veces se fijan de forma más duradera.

El problema es que el esmalte del diente es muy fino y no se recupera si se daña. Esto es algo de lo que la gente no es consciente, o si lo saben les da igual. El esmalte no se recupera ni se regenera… Si te colocas un adorno con pegamento fuerte o lo incrustas de alguna forma, puedes dañar ese esmalte, lo que aumenta el riesgo de caries, dolor o sensibilidad. Y en los casos más graves, puedes perder el diente.

El esmalte es muy importante, es como la piel de los dientes. Si se daña el diente entero se compromete… No duele como una caries, pero prepárate para sentir calambres y malestar frecuentes y ver como tus dientes cada vez se manchan y amarillean más sin que puedas evitarlo. Lo peor es que te va a durar toda la vida.

Parece una moda inocente, pero no lo es.

 

Blanqueamiento con carbón activo… como lavarse los dientes con lejía

Hay un montón de vídeos en internet donde la gente se cepilla los dientes con carbón activado para blanquearlos. Lo presentan como un método natural, porque ahora, todo lo que venga directamente de la tierra es bueno y todo lo del laboratorio es malo, eso es lo que piensa la gente.

El carbón tiene una textura muy áspera. Elimina manchas, sí, pero lo hace desgastando el esmalte. Y cuanto más lo usas, más débiles se vuelven tus dientes, porque literalmente los está disolviendo. Después vienen los problemas: sensibilidad, color amarillento y más caries.

Los dentistas no lo recomiendan por algo. Hay otras formas más seguras de blanquear los dientes, siempre con supervisión profesional.

 

¿Qué opinan lo dentistas de limarse los dientes?

Se lo comenté a mi dentista de TOT Dental, una clínica de mi ciudad en Sant Adrià del Besòs, y me dijo preocupada que esto es probablemente lo más peligroso que ha visto. Algunas personas, queriendo tener los dientes más bonitos o con una forma más recta, se los liman ellas mismas con limas de uñas o herramientas compradas por internet.

Esto es una locura. El esmalte dental no se regenera. Si te limas demasiado, puedes llegar a tocar la parte sensible del diente, lo que provoca dolor, infecciones y, en algunos casos, la pérdida del diente.

No hay forma de deshacer ese daño. Es un error que puede salir muy caro.

 

Ortodoncias falsas, jamás te la juegues

También se están vendiendo por internet aparatos dentales falsos. Hay quienes se los colocan ellos mismos sin tener ni idea.

Mover los dientes no es algo que se pueda hacer a lo loco. Los ortodoncistas estudian durante años para aprender a hacerlo bien. Usar un aparato falso puede hacer que los dientes se muevan de forma incorrecta, se aflojen, se caigan o provoquen un daño irreversible en la mandíbula.

Además, muchas de estas ortodoncias están hechas con materiales baratos que pueden causar alergias o heridas dentro de la boca.

 

Diastemas y otras moditas estéticas

Tener un pequeño espacio entre los dientes frontales, lo que se llama diastema, ahora se lleva. A algunas personas les gusta cómo se ve y otras incluso piden a su dentista que se lo haga.

El problema es que, para crear ese espacio, en algunos casos se lima el diente o se cambia la forma de la encía. Esto puede afectar la mordida, hacer que se acumulen restos de comida y provocar problemas en las encías.

Y si más adelante te arrepientes, cerrarlo no es nada fácil ni barato.

 

Los tratamientos extremos que hacen algunos dentistas si les pagas

No todo el peligro está en lo que uno se hace en casa. A veces, algunos dentistas poco profesionales te aceptan el cheque y te hacen tratamientos que son completamente innecesarios, solo porque el paciente los pide.

Un caso muy conocido fue el que se mostró en el programa Equipo de Investigación, donde enseñaron cómo algunas clínicas dentales ofrecían quitar todos los dientes sanos de una persona para ponerle coronas fijas. Todo por motivos estéticos.

Esto es una auténtica barbaridad. Quitar un diente sano es algo irreversible. Las coronas, aunque se vean bien, no duran toda la vida, pueden causar infecciones y hay que cambiarlas cada cierto tiempo.

El problema es que hay quienes, con tal de cobrar, aceptan hacer lo que sea sin pensar en la salud del paciente. Y muchas veces, la persona se arrepiente cuando ya es demasiado tarde.

 

No todo vale por una sonrisa bonita

La boca no es un lugar para hacer experimentos. Es para comer, hablar, respirar. Si algo sale mal, las consecuencias no son solo para tu autoestima, también pueden afectar a tu salud de forma seria y permanente.

La mayoría de estas modas se presentan como algo sin riesgos. Ahora todo lo queremos personalizar, incluso nuestra boca. Como si tuviéramos un Photoshop para adaptar nuestro cuerpo a nuestro gusto, simplemente pagando dinero. Pero lo que nadie te dice es lo difícil que puede ser arreglar un daño en los dientes. Y lo caro que puede llegar a ser.

Si no te gustan tus dientes porque los tienes mal, arréglatelos por salud. Una persona sana es feliz y esa felicidad que irradia la hace más atractiva que cualquier fila de dientes blancos y perfectos.

Vete a un dentista de verdad, no a uno que te diga que sí a todo, sino a uno que te explique bien lo que conviene hacer y lo que no. Hay muchas formas de mejorar la sonrisa sin poner en riesgo tu salud.

 

Piensa a largo plazo

Sé que todos queremos vernos bien, pero hay una línea que no deberíamos cruzar: poner en peligro nuestra salud por seguir una moda. Y eso hoy está muy de moda… por culpa de las Redes Sociales.

Los dientes no se pueden cambiar como una camiseta o un corte de pelo. Un error puede quedarse contigo para siempre. Por eso, antes de hacerte cualquier cosa en la boca, piénsalo bien. Infórmate, consulta con un dentista, y no te dejes llevar por lo que ves en las redes sociales o en la televisión.

Tu boca no necesita estar a la moda. Necesita estar sana.

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