Hay pocas cosas que se ponen de moda que me parezcan interesantes. Normalmente casi todo lo que se pone de moda son tonterías para adolescentes y señoritas que viven por y para el mundo de las tendencias. Sin embargo, ahora parecen hacerse puesto de moda dos cosas dignas de mencionar: la primera es cuestión de cada uno y tiene que ver con la salud, se trata de un estilo de vida natural, equilibrada y con mucho ejercicio; la segunda, que es la que más me interesa, tiene que ver con los animales. Cada día se denuncia más el maltrato animal y la mayoría de la población se suma al rechazo de la caza y de ciertos comportamientos humanos.
Antes de nada, he de aclarar, para evitar entrar en un debate interminable, que no hablo del mundo del toreo. Ahí no voy a entrar, me guardo mi opinión para mí porque este artículo no trata ese tema. Hablo de esos cazadores furtivos que matan a los animales para usarlos como trofeos porque, os aseguro, que no los cazan para comer. Lo hacen en África, lo hacen en Sudamérica y lo hacen en Asia… y también lo hacen en España.
Han detenido a cinco furtivos en la Sierra de Aracena detectados gracias a cámaras termográficas. Cinco cazadores furtivos que cazaban de manera ilegal en la Finca Caravales, en Huelva, fueron captados por las cámaras termográficas de la guardería animal de la finca cuando regresaban ya de su escapada nocturna. La Guardia Civil localizó a los furtivos con dos cabezas de venado y una de gamo.
¿Veis lo que os digo? ¿Y los cuerpos? ¿No los quieren? Pues claro que no, sólo quieren los trofeos, las cabezas, y el resto para los gusanos.
¿Dónde conseguir cámaras termográficas?
En España, las cámaras termográficas suelen usarse para vigilar lo que ocurre en hornos industriales y fábricas del sector, pero a raíz de esta noticia podemos comprobar que se les puede dar otros usos realmente interesantes así que, tras investigar un poco, os traigo Ibertrónix, una ingeniería española especializada en la medición de temperatura mediante sistemas termográficos y pirómetros infrarrojos que provee a más de la mitad de empresas y polígonos industriales con este tipo de necesidades productivas.
Las estadísticas actuales aseguran que más del 75% de la población siente repulsión pro actos como los que estos furtivos acaban de hacer, y más del 85% siente repulsión por cualquier acto cruel que se realice contra un animal doméstico: perros, gatos, hámsteres, cobayas, etc. ¿Será posible que si la evolución de pensamiento de nuestra sociedad sigue la línea actual, en unos años, la caza furtiva esté erradicada en nuestro país y el maltrato animal casi extinguido? Desgraciadamente, en mi opinión, ocurre como con la violencia de género, que por muy concienciada que esté la sociedad y por muy aberrante que nos parezca a la mayoría lo que ocurre en ciertas familias siempre hay alguien que la practica.
Sin embargo, gracias a la noticia sobre la detención de estos furtivos, se ha empezado a generalizar el uso de cámaras termográficas también para fincas privadas, granjas y demás sistemas de vigilancia, algo que podría salvar muchas vidas, tanto animales como humanas.